miércoles, 29 de mayo de 2013

La fe católica en Chiapas se hizo presente en la Basílica de Santa María de Guadalupe



Patricia Guillén
Como cada año desde 1890, peregrinos de la provincia eclesiástica de Chiapas cumplieron con su visita anual a la Virgen de Guadalupe, tras recorrer 24 horas de camino para llegar a la Basílica de Santa María de Guadalupe en la Ciudad de México, nuevamente dieron las gracias por las bendiciones, sueños, retos, favores recibidos, por ser el consuelo en sus penas y confidente en las alegrías y sufrimientos.
Por primera vez como Arzobispo de Chiapas, Monseñor Fabio Martínez Castilla recibió a los peregrinos presentes en la Villa del Tepeyac, “venimos movidos por el Espíritu Santo que Dios ha infundido en nuestros corazones, para vivir juntos en esta casa de todos, el abrazo de nuestra Madre y nuestra fraternidad solidaria”.

“Mis hermanos, con un corazón donde reina el amor Trinitario, continuemos nuestro caminar provincial de discípulos misioneros, con la confianza del hijo en brazos de su madre para que todo en nuestra vida sea en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo” expresó el Arzobispo de Tuxtla durante su homilía.


El folklor Chiapas estuvo presente en la Villa de Guadalupe, música, trajes típicos y regionales y parachicos alegraron y vistieron la entrada del Cerro del Tepeyac, haciendo de costumbre la presencia de la Arquidiócesis de Tuxtla, Diócesis de Tapachula y Diócesis de San Cristóbal de las Casas; la Misa de la peregrinación culminó con una danza tzotzil, ritual de adoración al Santísimo Sacramento, nuevo elemento incorporado como parte de la Liturgia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario